viernes, 18 de enero de 2013

Eternidad de ti


Quizás en lo eterno no valga la pena esperar
a alguien que derrite inviernos
al mover la boca,
ya sea para besarme o para hablar,
me muerdes el labio de ambas formas.
Quizás lo tuyo
sea hacer eterndades en cada vida que tocas,
pero es que cuando me tocas a mí
es tan facil olvidarse del tiempo
que me creo dueña
de querer quererte siempre.
Es que te recuerdo durmiendo,
con cara de cielo,
como si no supieses incendiarlo
cuando de colchones se trata.
Luego te despertaste y me miraste,
como si yo fuese un oasis en un desierto,
y, claro,
quise quitarte la sed.
Y llegó al reloj a apurarnos el tiempo,
pero esta vez
lo dejamos fuera de juego
porque el juego era olvidarnos de él.

No hay comentarios:

Publicar un comentario