miércoles, 23 de octubre de 2013

Lo que no dije



Me quedan cinco minutos para verte
y sigo sin saber sonreír sin que se me escapen tus fantasmas.
Me pesan los ojos de no mirarte
y ya no me resisto a caminar mirando al suelo.
Doy pasos firmes hacia el futuro,
pero no puedo dejar de mirar atrás
y recuerdo tu sonrisa,
la que trajiste el primer día,
la que decía:
“vengo a cumplir sueños, y yo sólo soy el primero.”
Las ruinas son lo que queda de mí
cuando al mirarme lo único que ves son recuerdos.


Quiero hablarte de la soledad,
he sentido su aliento toda la noche en mi cuello,
su voz en mis pensamientos,
y tus dedos delineando en mi espalda todo lo que no nos dijimos.
Quiero explicarte que aquí te oigo en cada acento.
que ya no me recuerdo,
que me duelen tus arañazos 
mientras sigo recogiendo los trozos de lo que solía ser.
Tengo las manos llenas de hielo de no tocarte
y sigo sin saber responder cuando me preguntan quienes fuimos.
Quiero decirte que ya no me acuerdo de soñar,
ni sé de ningún sueño que no sea tenerte al final del día,
compartirte con la poesía.
Que fui yo, quise tanto ser la mujer de tu vida
que se me olvidó que ya tenías una.


Quiero que sepas
que siempre me gustó que fueses un desastre,
que conocí mundo y que lo tengo claro:
esta vez vengo para quedarme.